PRONUNCIAMIENTO
El mundo y el Perú enfrentan con preocupación y dolor la pandemia del coronavirus. Acaba de confirmarse la muerte de un médico en Lima y se sabe que varios policías también han perdido la vida.
En esta hora grave, la población de Sicuani se siente indignada e impotente. Indignada porque mientras pueblo y autoridades se movilizan con generosidad y sacrificio, el alcalde provincial de Canchis ofrece un espectáculo de frivolidad. Indignada porquemientras muchos de los que se ganan la vida de un día para otro, se desesperan por no poder trabajar y alimentar a su familia, no se siente solidaridad ni empatía. Indignada porque mientras el personal de salud, policías y militares, personal de limpieza pública, transportistas, comerciantes y otros arriesgan su vida para cuidarnos, recibimos de otros un mensaje de despreocupación y falta de responsabilidad.
La población se siente impotente porque por cumplir con la cuarentena, no puede hacer escuchar su voz, expresar su cólera y sus reclamos. Impotente porque en la provincia de Canchis, en los últimos años, numerosos casos, especialmente homicidios, no han sido esclarecidos, oficialmente no hay responsables, no hay condenas. La población teme que una vez más, en este caso no pase nada…
En esas circunstancias la Asociación Allin Kawsay EXPRESA su solidaridad con la víctima, con la población de Sicuani y Canchis. Reiteramos nuestro compromiso en seguir trabajando para prevenir la violencia y contribuir a la construcción de una sociedad de Buen Vivir para todos. Somos conscientes que la violencia, no son solamente los golpes, maltratos físicos y otros. La violencia está también en estructuras de inequidad y desigualdad, falta de servicios básicos, falta de acceso a una educación, salud o justicia de calidad, falta de trabajo, falta de oportunidades de tantos jóvenes que quisieran estudiar y no pueden por carecer de economía, jóvenes que por conseguir un trabajito tienen que sufrir abusos y maltratos, … La violencia está también en las mentes y corazones, por ejemplo, todas las formas de discriminación, el machismo que hace que una joven en busca de trabajo deba someterse a los caprichos y abusos de un posible empleador. La violencia está también en reflexiones que hemos escuchado esos días: “¿Qué hacía esa chica en la calle, si estaba prohibido?, ¿Por qué no se ha ido, si no estaba de acuerdo?, ¿Por qué sus padres han esperado tanto antes de poner la denuncia?, ¿Por qué no ha puesto la denuncia ella misma, si es mayor de edad?” Todo esto es una forma de sugerir que la víctima tiene la responsabilidad de lo que pasó y eso también causa indignación.
Por supuesto no pretendemos adelantar un juicio, que se investigue y que el Poder Judicial emita una sentencia a la altura de las circunstancias que vive el país, tomando en consideración el clamor de gran parte de la población, que espera un liderazgo constructivo de sus autoridades y está preocupada por la impunidad reinante, que es puerta abierta a que se cometan más abusos y delitos.
Asociación Allin Kawsay Sicuani,
10 de abril 2020.
